Con el fin de minimizar las dificultades que atraviesa el sector de la hostelería, bares y restauración como consecuencia del coronavirus, Borges da un paso más en materia de Responsabilidad Social Corporativa. Concretamente, la compañía pone en marcha un plan para la reactivación del canal que está focalizado en tres segmentos: económico, comercial y formativo.

A nivel económico, Borges amplía el plazo de pago hasta seis meses de todas las compras que se realicen hasta el 31 de agosto para incentivar la campaña de verano y allanar el camino hacia la normalidad y la reapertura.

En el ámbito comercial, el Grupo, a través de sus marcas Borges, Capricho Andaluz, Ortalli, Star, Castillo Andaluz y Cosecha, va a donar cinco millones de envases de un solo uso a hoteles, bares y restaurantes para optimizar el consumo de aceites y vinagres. Estos envases monodosis requieren una mínima manipulación, disminuyendo las posibilidades de transmisión del coronavirus. Además, al estar fabricados con materiales reciclados contribuyen a la conservación del medioambiente y constituyen una apuesta por la sostenibilidad.

Por último, Borges implantará un plan especial de formación y asesoría, impartido por los mejores especialistas, focalizado en incrementar la seguridad alimentaria para contribuir a la reactivación de sus ventas.