Natural de Cariñena (Zaragoza), Alberto Ferruz empezó a los 12 años a colaborar en el restaurante La Bodega, propiedad de un familiar. Se formó en cocinas como la de Martín Berasategui, con quien pasó más de tres años, antes de ejercer como jefe de cocina del restaurante gastronómico del hotel Marriot en Denia. Tenía entonces 23 años. Sin duda, muy pronto conectó con la riqueza de productos y el potencial de la Marina Alta, una comarca alicantina que hoy acoge una gran cantidad de restaurantes reconocidos por la guía Michelin.

En 2011 abrió el restaurante BonAmb, acrónimo que surge de la asociación de las palabras Bon Ambient. Un establecimiento ubicado en Jávea (Alicante) que ha evolucionado sin descanso hasta convertirse en destino gastronómico de primer orden para todo aquel que visita la Comunidad Valenciana y que ya cuenta con dos estrellas Michelin.

Su propuestas gastronómicas no solo muestran interés por los productos del entorno sino que se fijan en la cocina ancestral que ha aportado una personalidad al territorio. De esta manera, técnicas ancestrales como las salzanes, los secados al sol o la maduración se incorporan a lo platos de BonAmb, sublimadas y reinterpretadas desde un prisma moderno.